por Hugo Bruschi en el Año de la Dignidad.
"Más vale malo
conocido, que bueno por conocer". Esta afirmación tiene sus orígenes en
la comodidad, en la aceptación de una realidad hecha a la medida, por
quien la experimenta. De otro modo, como se puede entender el miedo a lo
que no se conoce? Y si lo "bueno por conocer" es realmente bueno o por
lo menos mejor?. Sin embargo, esta parece ser la sentencia que mejor se
ajusta al comportamiento de millones de personas, de las que nosotros
uruguayos no somos la excepción. Y estas conductas se reflejan a la hora
de elegir a quienes habrán de representarnos. Cuando la oferta del
espectro político, no se diferencia demasiado entre sí, la gente opta
por el "menos malo". En cierta ocasión, Juan D. Perón fue preguntado por
su popularidad y la de su Partido, a lo que respondió: "nuestros
rivales son peores". Toda una lección en materia de comportamientos
colectivos.
En estas elecciones internas de los Partidos uruguayos,
se registran algunos fenómenos, que además de confirmar lo que ya se ha
convertido en regla de conducta, aportan algunos ingredientes realmente
interesantes: los Partidos se acusan mutuamente, por lo que hicieron o
no hicieron. Ud. puede creer que estamos en el mes de Octubre y no en
una elección interna. El Partido de gobierno presenta 2 candidatos, que
se disputarán el cargo a presidente por toda la coalición. Y en esta
instancia interna se prohibe toda discusión de ideas, para no mostrar
una imagen negativa que podría favorecer al enemigo.La línea oficial
impone las reglas del juego y hasta el propio presidente ha dicho que
"estas elecciones resultan tan aburridas como bailar con la hermana". O
sea que ya conoce el ganador y considera la elección un evento, para
llenar la fórmula y cumplir con una formalidad. Y la candidato que
podría hacerle sombra al candidato "oficial", tiene que bailar el vals
que le tocan. Qué seriedad puede tener todo esto? Para que se postulan 2
candidatos? La única explicación posible es que se trata de un circo
montado para cazar incautos y desprevenidos, que votarán por uno u otro
sin saber exactamente que propone cada uno. Y también hemos visto, como
alguna gente cansada y desalentada por algunas cosas "non sanctas" que
van saltando a la opinión pública, han decidido acompañar a la candidato
que "discrepa", a la opción femenina, a la que cuestiona la edad del
candidato "oficial", pero no mucho más por las dudas. Pero que a la hora
de la verdadera discrepancia, votó y acompañó todo lo que le indicaron.
La
falta de una verdadera discusión, ha llevado a la gente que sigue cual
hinchada sigue a su equipo, que el problema pasa por "frenar a la
derecha", sin que nadie se pregunte como puede ser que un Partido que
lleva 2 ejercicios de gobierno, hoy como todo argumento, salga a la
calle a decir que "hay que frenar a la derecha". Qué ha pasado, que se
ha hecho y que nó? Y como esa discusión jamás llegará, porque aquí todo
se hizo bien, tan bien que Moody`s nos mejoró la nota en materia de
cumplimiento con la deuda, deducimos que el Pocho Perón sabía lo que
decía. Sin embargo, lo que el Pocho ignoraba por entonces, era que los
Pueblos después de muchas elecciones y otros tantos desengaños, han
descubierto otra alternativa, otra forma de elegir. Y si bien aún no han
comprendido, que no hay soluciones dentro de los marcos capitalistas y
menos aún en estas formas de democracias tuteladas, por lo menos han
llegado a la conclusión que no se harán cómplices de su propia
desgracia. De ahí que el voto nulo, el voto por nada ni por nadie, será
la fórmula ganadora. Será una forma de estar eligiendo por la DIGNIDAD.