por Hugo Bruschi en el Año de la Dignidad.
A instancias de los compañeros en la red,hemos decidido iniciar un blog
al que llamaremos "la vidriera irrespetuosa". Para quienes aún no sepan
quien es Alberto, diremos que es el hombre detrás de los controles. En
este caso podríamos decir "detrás de la vidriera", dando forma a este
cambalache de opiniones, para hacerlas más presentables a ojos de
quienes se animan a leernos. Un imprescindible cuando se trata de llevar
a la pantalla chica - nó la Tv. por favor! - de su computadora, tanta
información que de otro modo no conocería, a tantas ideas que hombres y
mujeres que aún piensan, tratan de hacer llegar al resto de los humanos
que compartan sus mismas inquietudes. Y esta vidriera será irrespetuosa,
no para faltarle el respeto a nadie, porque nosotros estamos por encima
del agravio personal. Esa tarea se la dejamos a los que faltos de
principios, apelan al insulto como todo argumento.
Será irrespetuosa
como la describió Discépolo, mostrando como la misma, mezcla en forma
despiadada la impudicia y la virtud. No respetaremos a los "respetables"
que nos mienten a diario, porque si respetáramos la mentira, seríamos
cómplices de la misma. Irrespetaremos también, a los que emplean un
discurso, distante de sus actos. Y trataremos de compartir con quienes
así lo entiendan, un sin fin de aspectos relacionados con la Sociedad en
que nos toca vivir, de tal modo que todos podamos indentificar sin
siquiera mencionarlos, a los "Don Ciccios y Napoleones", sin permitir
jamás que los "inmorales nos igualen"
Porque en ciertos ámbitos de la
corrupción, da lo mismo "ser derecho que traidor", porque allí nadie
pregunta a nadie que lleva en su mochila. Discépolo no se equivocaba,
pero nosotros desde este humilde lugar del pataleo, trataremos de
demostrar que aún quedan reservas morales en el país, que existen otros
espacios de la Sociedad, en donde ser traidor a una causa tan sentida
por el Pueblo, equivale a la capitulación moral que inhabilita, por más
que quieran disimularlo con discursos,entre gente que viene aplaudiendo
desde la esquina. Y más temprano que tarde, terminarán en las vidrieras
del cambalache a la sombra de los dignos. Confirmando los contrastes.
Una
vez compartidos estos puntos de vista, no tengo dudas que nos
encontraremos en este difícil camino que poco a poco estamos
construyendo y cimentando,de ventanas abiertas a la dignidad
imprescindible para cualquier tarea transformadora. Y esta "vidriera
irrespetuosa" la encontrarán entrando a El Muerto y a la derecha de la
página. Nó de las ideas, que a diferencia de las políticas confusas,
siempre serán de izquierda. Y en esta tarea los esperamos Amigos, a los
que conocemos y a los que vendrán, porque sin Uds. ningún proyecto por
mejor intencionado, tendría sentido.