por Hugo Bruschi en el Año contra la Impunidad
Habían salido de
Montevideo, con la intención declarada de negarle el voto a Venezuela al
Mercosur, algumentando que el Senado Paraguayo se oponía a tal
ingreso. Estas declaraciones fueron hechas por Almagro y por Astori y
están registradas para quienes tengan mala memoria. Sólo la presión
enérgica de Cristina Fernández y Dilma Roussef, hicieron cambiar de
opinión a Mujica quien terminó votando el ingreso. Y estas cosas
Venezuela las sabe. Luego comienza un período de "amistades" con visitas
de Hugo Chávez seguidas de algunas donaciones. Hugo Chavez sabía muy
bien aquello de "que a los amigos hay que tenerlos cerca. Y a los
enemigos más cerca aún...." Hugo Chavez los conocía muy pero muy bien. Y
la gente se lanzaba a las calles para saludar a Chavez con banderitas y
bombos, en donde no faltaron tampoco las canciones "Simón Bolívar
Simón, caraqueño americano...". Donde quedaron esas banderitas y esas
canciones, no lo sabemos aún. Que harán ahora que el "enemigo" es Maduro
y un gobierno hermano que se defiende de una agresión, tampoco.
El
gobierno de Venezuela, al igual que otros gobiernos de la región, sabe
perfectamente que LOS PRINCIPIOS no figuran en la lista de prioridades
de este gobierno regresista. De ahí que ya nada les asombra. Al igual
que en el fútbol profesional, ellos amenazan y chantajean. Si no me dan
aquí, me voy para otro club que pague mejor. Por eso muchas veces los
paises de la región, prefieren halagarlos con alguna donación o
tirándoles algunos huesos con carne. Y lo más triste es que ellos mismos
lo confiesan. Si no consigo lo que quiero con Argentina, me paso para
el lado de Brasil. Los paises ya conocen este juego del ratón debajo de
la mesa. Pero esos paises necesitan de la unidad en el Mercosur. "Si no
nos dan lo que queremos, buscaremos otros caminos" es la amenaza
permanente. Puede un gobierno de esta naturaleza merecer respeto alguno?
Ahora
llaman al Embajador Venezolano en Uruguay, para explicar los dichos de
Maduro. Porqué mejor no llaman al Embajador de los EEUU a explicar
porqué estas amenazas y estas intervenciones, en la vida política de un
país soberano, con un gobierno surgido de las urnas como les gusta decir
en otras ocasiones, contra un país que jamás invadió a nadie, contra un
país hermano en definitiva? Esta gente no sólo carece de principios,
sino también de verguenza. Están trabajando en favor de una intevención,
precisamente contra aquél pais que en plena dictadura, decidió romper
relaciones, para hacerle saber al mundo que una maestra uruguaya cuyo
nombre era Elena Quinteros, había sido secuestrada en los Jardines de la
propia Embajada. Cuando otros que hoy integran este gobierno,
estuvieron a favor de aquel secuestro y de aquella dictadura. Aquella
Venezuela que por entonces no estaba gobernada por Chavez ni Maduro,
sino por otro Partido muy lejos de la Revolución Bolivariana. Se ve que
los principios vienen de lejos y van más allá de los gobiernos. Qué
diría hoy la querida Tota si viera como esta gente, cuestiona las
afirmaciones del presidente de un país agredido por el imperio poniendo,
en tela de juicio las mismas.?
Nada nos asombra, esto forma parte de
un plan muy bien elaborado. No se trata de ninguna casualidad las
declaraciones del Vice-Presidente uruguayo. (no mencionamos su nombre,
por respeto a su padre fallecido). Ellos sabían perfectamente que el
Presidente Maduro saldría al cruce ,de quienes ponían en duda sus
denuncias de ingerencia imperial en los asuntos venezolanos. Y cuando la
respuesta se hizo presente, tuvieron el resultado esperado y ahora
pueden posar de víctimas. Lograron de este modo, un escenario
inmejorable para mirar al costado, cualquier intervención militar en
Venezuela. Juegan a los "enojados y ofendidos". Ya en un artículo
anterior, La Vidriera advertía que la situación uruguaya por sus
vínculos imperialistas, era la más comprometida y que estaban en una
encrucijada de la que no sabían como salir. AHORA ENCONTRARON LA
PUERTA........
