lunes, 20 de octubre de 2014

El día siguiente.....


por Hugo Bruschi en el Año de la Dignidad

.......escucharás muchas cosas y aprenderás otras tantas. Pero será tarde. Por ello LA VIDRIERA que tiene algunos carnavales, boliches y otras tantas elecciones arriba, te quiere dejar aquí algunas reflexiones antes que pongas el papelito, que te hará cómplice sin saberlo,de propia derrota. Porque tú - al igual que miles de jóvenes uruguayos- si es que no estás animado por alguna promesa de empleo, no irás nada en esta jugada. Este juego está inventado para que gane "la banca" y tú estás condenado de antemano.
Tal vez lleguemos a tiempo y tal vez aunque te duela, deberás reconocer que te engañaron, que tendrías que postularte al "Pelotudo de Oro", de sólo pensar que te agarraste a las piñas con otros muchachos uruguayos que repartían otras listas. Pero será positivo y no serás ni el único ni el primero.

Quien te escribe también tuvo tus años, aunque el Uruguay era otro y aún quedaban espacios a la esperanza. Y también tuvo muchos desengaños, más por ello jamás bajó los brazos. Hay muchas formas de participar en la vida política de un país, que nada tienen que ver con este negocio ajeno, en donde el perdedor siempre será el Pueblo. Y en ese día siguiente que te mencionamos, tú serás testigo de algunos espectáculos que jamás - a tus años jóvenes e ingenuos- hubieras imaginado. Enemigos "irreconciliables", aquellos que se insultaron algunos días antes, abrazándose y a los besos entre Whiskeys y Champagne del bueno. Y cuando te gane el desaliento, algún tahur profesional de la joda te dirá que también los jugadores de Nacional y Peñarol se pelean, pero cuando llega el momento de ponerse la gloriosa celeste, se borran las diferencias para poner el alma en cada jugada. La celeste en este caso sería la Patria........los malpensados que nunca faltan, dirían que son las bancas parlamentarias a 200.000 pesos cada una, más los beneficios que el esfuerzo requiere.


NI VENCIDOS NI VENCEDORES!!, gritará el que ganó por escaso margen de maniobra en el próximo ejercicio, pues sabe que hay que abrir el juego a las puntas. Aunque habiendo ya coincidido en la política económica, pareciera una declaración innecesaria. Y si se olvidaron, la Embajada y el Fondo Monetario se los recordará. Las inversiones y el pago de la deuda, no quieren gobiernos inestables. Y para ello nada mejor que un buen reparto estatal.

DESIGNAREMOS A LOS MÁS COMPETENTES, SIN IMPORTAR EL PARTIDO A QUE PERTENEZCAN. Y seguramente entre esos "competentes" llegarán otros Lorenzos y otros Calloias, que luego serán sobreseidos o exonerados, en caso de "errores" que la Justicia se apresuró a juzgar en primera instancia. Siempre hay otras que tienen otra opinión y por ello fueron candidatos.

El candidato perdedor nos hará saber también en su discurso QUE ESTE FUE UN TRIUNFO DEL PUEBLO URUGUAYO, QUIEN CONCURRIÓ A LAS URNAS A EXPRESAR SUS SIMPATÍAS SIN ODIOS NI RENCORES, DANDO MUESTRA DE UNA MADUREZ CÍVICA QUE HOY ES ENVIDIA DE TANTOS PAISES.
Otros destacados dirigentes, también coincidieron en la vocación democrática de nuestro Pueblo y creen que este será el punto de partida de aquél "despegue" que se hablaba en el pasado. Por las dudas ya se han tomado todas las precauciones y Tabaré Vazquez nos hizo saber que existe "un colchón" que amortiguará la caida, en caso que algo salga mal. Este será más o menos el tenor de las declaraciones, que los jóvenes oirán por primera vez y que los más viejos conocemos "por el libro" como decía un reo de mi barrio, cada vez que lo llevaban al Juez.


En fin, todo un final de fiesta como era de esperar. También desde el exterior, se siguió con mucha espectativa el resultado de las urnas. Incluso trascendió que un portero del Fondo Monetario acostumbrado a recibir ministros, declaró a la prensa que el "Uruguay estaba en buenas manos". Toda una garantía de tranquilidad para los uruguayos. Ahora sólo cabe esperar los resultados y el cumplimiento del programa, cosa que no será muy difícil dado que nadie los leyó, ni votó por programa alguno. En ese sentido los uruguayos no somos tan exigentes.

Dignidad arriba y regocijo abajo, había dicho Aparicio Saravia alguna vez y parece que aquella inquietud se viene cumpliendo. Por lo menos la gente está contenta, no es en definitiva la meta más preciada para cuaquier gobierno?

Y la VIDRIERA cuya existencia está precisamente motivada por las inquietudes populares, no quiere permanecer al margen de esta fiesta ciudadana, por lo que sólo nos resta desearle buena suerte a todos y jamás olvidar aquella máxima nacida del alma: QUE SEAN LOS ORIENTALES TAN ILUSTRADOS COMO CREYENTES.