martes, 22 de marzo de 2016

Eramos prisioneros


por Hugo Bruschi en el Año de la Resistencia.

No tenemos la bola de cristal, mucho menos somos entendidos en economía con sus complicadas leyes, tan complejas que muchas veces los mismos estudiosos, no atinan a comprender en toda su dimensión. La humilde Vidriera apenas puede subsistir comprando y vendiendo objetos usados.....Sin embargo cuando vemos ciertas cosas, cuando conversamos con nuestros clientes, cuando la gente llega con sus televisores o sus estufas aún calientes, presentimos que algo anda mal y que tiempos muy difíciles nos esperan. De puro olfato.
Los últimos acontecimientos registrados en Brasil, donde el gobierno progresista de Dilma se juega su estabilidad, han disparado las alarmas en filas del progresismo celeste. Un fantasma de Maracaná pero a la inversa. Y no es para menos....No en vano Tabaré Vázquez, Nin Novoa y Almagro hacen denodados esfuerzos para lograr el apoyo del continente, a la Presidente Dilma Roussef y su gobierno. Y se habló de Dictaduras y Golpes de Estado, para hacernos entender la gravedad del asunto. Presentadas así las cosas, no hay forma de equivocarse: apoyamos al progresismo de Dilma porque somos demócratas. Y partiendo de este entendido, cualquier crítica a su gestión, cualquier sospecha de corrupción, significará un apoyo a las fuerzas golpistas. O sea que en tales circunstancias, deberemos elegir por el mal menor. "O nos aceptan así como somos, con nuestros defectos y carencias, o se vienen los golpistas".
A decir verdad, si bien es cierto que plantear las cosas de este modo tiene sus ventajas, no por ello deja de ser una gran mentira sólo esgrimida para asustar a la gente. Y por supuesto que lo lograron. La gente se largó a las calles en apoyo a Dilma y contra el Golpe de Estado. De haber estado allí, seguramente también me habría sumado para no quedar descolgado. A esas alturas, en esas circunstancias dramáticas, nadie piensa que los Golpes de Estado son cosa del pasado. Que sin el apoyo de "la embajada" no prosperan, así un grupo de aventureros lo intentara. EL PROGRESISMO ES UN INVENTO QUE TENDRÁ QUE DURAR POR LO MENOS 50 AÑOS.
El progresismo es la forma ideal de dominación capitalista, ajustada a la época post-dictaduras. Fueron la salida "no traumática" en la que todos nos sentiríamos identificados y quienes así no lo entendieran, quedarían rezagados y condenados a vivir en minoría. El progresismo nos tira un hueso con carne para que nadie pase hambre, mientras los dueños del negocio se llevan nuestros recursos y nos explotan de forma civilizada. Para ello tenemos una Central Obrera que los controlará y no permitirá exceso alguno. Creen Uds. que el capitalismo sacrificaría este escenario ideal, para embarcarse en un Golpe de Estado que nadie sabe como puede acabar?
Sin embargo, es menester aclarar también, que la preocupación progresista celeste por la suerte de Dilma y Lula, no es del todo alarmista ni infundada.Ellos saben que de esa suerte, también se juega la suya. Y además, casi de paso diríamos, nos envían un mensaje inequívoco: "Déjense de joder con denuncias de corrupción o negocios de dudosa transparencia, que aquí también se puede repetir la aventura militar". Se da cuenta Ud. Amigo de La Vidriera como viene la cosa?
En un mundo donde millones de personas deberán elegir entre Hillary Clinton o Trump, casi podríamos decir que no tenemos alternativas, que sólo nos queda la resignación. Por todo ello si tenemos que elegir entre peste y cólera, no lo tome como algo negativo sino como un derecho que nos otorga la Democracia.