martes, 1 de marzo de 2016

Ajustando cuentas....


por Hugo Bruschi en el Año de la Resistencia

Sabido es, que los meses veraniegos con playas y carnavales, no son los más apropiados para la protesta, si es que hay necesidad de protestar claro está. Protestar por el sólo hábito de hacerlo, carece de sentido no le parece? Conocí a un hombre que provocaba a su vecino por ser blanco y cuando "ganó" le grito en la cara: "ahora gobierna el Pueblo". Ese hombre quisiera salir de su casa a protestar, pero no puede. Acaso no gobernaba el Pueblo, acaso no eran sus compañeros los gobernantes? Y si lo vé el vecino, que opinará? Está preso de su ingenuidad y nada puede hacer. De lo contrario le pasaría como aquél gil que compró un buzón y cuando iba a hacer la denuncia la mujer le dice: no vayas que se te reirán en la cara. Estos son los resultados del Cuento del Tío.
Y así debe ser, pues las últimas convocatorias no registraron más de 30 personas y con la cifra creo haber sido un tanto optimista. En una palabra, no hay motivo de inquietud y ya ni siquiera "los ajustes de cuentas" llaman la atención.Ni los oficiales ni los ilegales. El ajuste de cuentas oficial, se hará sentir en el bolsillo ciudadano, pues se habían registrado algunos desórdenes que exigían ser corregidos. Del mismo modo que en ciertas zonas de la Ciudad, cuentas mal llevadas suelen ajustarse. Y como consecuencia de estos ajustes, ha cobrado vigencia una vieja enfermedad: LA PLOMBEMIA (exceso de plomo en el cuerpo). Y de esta enfermedad, nadie está libre. Al igual que sucede con el mosquito del dengue o del Zica, este otro portador no tiene alas, pero zumba al oido de aquél que tenga la mala suerte de vivir o pasar por ciertos barrios.
Murió de Plombemia, tenía 8 plomos en el cuerpo, nos comentó un vecino de un barrio que antes se caracterizaba por ser un barrio de trabajadores. Yo le comenté al vecino, que en el exterior tienen una imagen muy distinta del Uruguay. Fue la imagen que pintó Cantinflas cuando decía que este era un pais envidiable para vivir en Paz. Y hablaba de la legalización de la marihuana, dando prueba de una Sociedad innovadora y tolerante. Y las Agencias de Viajes no tardaron en descubrir los beneficios.......de ahí entre otras cosas la popularidad de Cantinflas. De pronto Uruguay - a quien muchas veces se le confundió con Paraguay - apareció en los catálogos como destino de placer. Junto a sus playas (De Punta hacia Rocha claro está), se mencionaba en lugar de destaque, la legalización de la droga que sería adquirida en las farmacias. Y las ventas se duplicaron, ahora los adictos ya no tendrían que exponerse o arriesgar su seguridad. Si Ud. Amigo de La Vidriera alberga alguna duda, lo invitamos a preguntar en las farmacias del este, cuantas veces por día llegan turistas preguntando por el cannabis, que le hará más placentera la estadía. Hubo una farmacia en Rocha que cumpliendo con la recomendación oficial de "atender bien al turista", le dijo a uno que sabemos: "aquí no se vende aún, pero allí y le señaló el lugar, puede encontrar lo que busca".
Como Uds. ven Amigos, el negocio funciona. Muchos de los que hasta ayer plantaban lechugas o tomates, van viendo por donde viene la cosa y de este modo desafían la plombemia. Por ello no se asombre mi Amigo, si en su barrio hasta ayer tranquilo y apacible, se registra un caso de este flagelo.