miércoles, 17 de septiembre de 2014

Las golondrinas viajan en Buquebus


por Hugo Bruschi en el Año de la Dignidad

Estas no son las de Bécquer, ni harán nido en los balcones. Y para ahorrarles el esfuerzo de cruzar el río, les ofrecen todas las comodidades. Son los llamados "votos golondrinas" o "voto buquebus", modalidad ésta que ya se inicio tiempo atrás. Se trataría de 20.000 golondrinas dispuestas a apoyar al Dr. Tabaré Vazquez. Sí mi Amigo, Ud. ha leído bien. Al mismo individuo que no hubiera dudado un instante, en pedir ayuda imperial para atacar al país en que residen miles de uruguayos. Y todo ello para defender una pastera contaminante y de este modo confirmarse con un buen lacayo. Qué hubieran opinado los uruguayos, si esto fuera al revés? Si miles y miles de argentinos viviendo en el Uruguay, cruzaran a votar por un candidato que no hubiera tenido reparo en atacarnos? El grito en el cielo, verdad?

Bueno, pero así son las cosas y desde la Vidriera sólo nos queda el derecho al pataleo, esto no lo cambiaremos nosotros. Sin embargo, hay un hecho que sí nos llama la atención y tiene que ver con los criterios que se manejan, en cuanto al voto exterior. En ocasión del plebiscito por la Ley de Caducidad y el voto Epistolar- los dos votados en contra por los uruguayos -, se argumentaba entre la hinchada, que "los de afuera son de palo" y  "que nada tenían que hacer los que no vivían aquí". Un conocido escritor uruguayo dijo en la oportunidad de forma elegante, que mucha gente había confundido el domicilio con la identidad. Sin embargo yo creo que aquí jugaron otros factores y están mezclados otros ingredientes como la impotencia y la frustración. Son los mismos que decían: "que van a buscar a otros países"? o "aquí no querían trabajar y allá van a lavar platos y toilettes". Si en un escenario de ficción, apareciera en algún diario un aviso pago por la embajada de Canadá o Australia o Nueva Zelanda, invitando con casa y trabajo a todos aquellos dispuestos a viajar, yo les puedo asegurar que en este país, quedarán los diputados y senadores, porque hasta los ediles se las toman. Ahora les toca esperar que esos mismos a quienes antes les negaron el voto, vengan a votar. Pero no se olviden, que las golondrinas son aves de paso y por lo tanto votan y vuelan......