por Hugo Bruschi en el Año de la Resistencia.
Èsta era la
pregunta obligada cuando éramos niños, sobretodo cuando comenzaban las
clases y conocíamos a nuestros nuevos compañeros.Por entonces ser hincha
de Rampla o Wanderers era poco frecuente, si los habían pasaban a
formar parte de aquella sentencia: Toda regla tiene su excepción.
Felizmente
los tiempos han cambiado para los llamados "cuadros chicos" y hoy nadie
se siente menos por ser hincha de River o Defensor. Y algo similar
sucede en el otro gran deporte, que despierta pasiones en la Sociedad
Uruguaya: LA POLÍTICA. Y ahí como sucedía con Nacional o Peñarol, las
simpatías se dividían entre Blancos o Colorados, hasta que en 1971
aparece en escena otro equipo que poco a poco fue ganando espacio, hasta
convertirse en un grande que ahora juega en Primera División. Sin
embargo,aquella pregunta tiene más vigencia que nunca. DE QUIEN SOS
HINCHA?
Es justo hacer notar también, que para este deporte la
respuesta no resulta nada fácil, agravada además por acontecimientos
externos que obligan a tomar partido. Para bien y para mal. Así nos
obligan a elegir o mejor dicho a hinchar por Hillary o por Trump, por
Macri o por Cristina, por Dilma o por los Diputados golpistas, entre
progresistas y rosados. Se da cuenta Ud. Amigo de La Vidriera que esto
no es "changa"?
Y tendremos que ser coherentes para no caer en el
ridículo o quedar presos de nuestras contradicciones. La Vidriera
sospecha que un buen progresista será hincha de Cristina antes que de
Macri, aunque sus dirigentes opinen lo contrario y tomen partido por el
primero, con quien ya se han establecido lazos de amistad y un poco más.
Un buen progresista apoyará a Dilma antes que a los Diputados
golpistas, aunque sus dirigentes ya están dudando lo que en un principio
era muy claro. Parece que ya no pueden ponerse de acuerdo acerca del
golpe......Y seguramente -aunque el escenario está más lejos -
simpatizarán con Hillary antes que Trump que parece salido de las
cavernas. Hillary es mucho más civilizada, de ahí que la elección será
más fácil.
Sin embargo, la pregunta que surge inevitable es, que
harán quienes no quieren ser hinchas de nadie? Los que no quieren verse
reducidos a simples espectadores de un circo que más que reir, nos hace
llorar, los que no aceptan su condición de hinchas del menos corrupto,
del menos malo, los que creen que la Democracia es otra cosa que votar
cada 5 años. Bueno, no se puede conformar a todo el mundo, las cosas son
como son. Es lo que tenemos papá.....como comentó un viejo
revolucionario y esos hombres saben mucho.