lunes, 19 de mayo de 2014

La verdadera unidad

por Hugo Bruschi en el Año de la Dignidad.

Ha trascendido en estos días, que un grupo de sindicatos estaría promoviendo la creación de una nueva Central de Trabajadores. El argumento esgrimido, sería la discrepancia con la actual conducción del movimiento obrero, la falta de democracia, la persecusión a quienes piensan diferente a la línea oficial y la imposibilidad de cambiar las cosas en las actuales estructuras del PIT-CNT. Desde esta página hemos sostenido más de una vez, que evidentemente ha llegado el momento de devolverle a la herramienta sindical, su verdadero rol que no es otro que la defensa de los intereses de los trabajadores, entendiendo por ello que los intereses de clase, jamás podrán confundirse con cuestiones partidarias o con patronales. Se trata de un principio irrenunciable, para quienes pretendan eregirse en representantes del hombre o mujer asalariados. En las actuales circunstancias, en donde la Central está más preocupada por la imagen del gobierno en el año electoral, no es raro entonces que surjan voces que sostengan que ese no es el papel que le corresponde al movimiento obrero.
Por supuesto que como era de esperar, han salido a escena voces en defensa de la conducción oficial, voces que acusan de divisionistas y otros propósitos a estos sindicatos discrepantes. Aún  es temprano para tomar partido por esta iniciativa, dado que en primer lugar creemos en la unidad, segundo porque muy poco sabemos de la profundidad y alcance de las críticas, pero fundamentalmente desconocemos cuales han sido las propuestas no escuchadas.

 No tenemos claro pues, que propone esta iniciativa, que papel entienden debería jugar la Central Obrera. Lo único que tenemos claro y no necesitamos declaración alguna es: que la verdadera UNIDAD no es "montón", del mismo modo que venta de la soberanía no es Progreso, ni que Frente Amplio es sinónimo de izquierda. Es bueno siempre recordar estas cosas, sobre todo en tiempos donde la ensalada ideológica ha mezclado todo, como en la vidriera de los cambalaches. Y también tenemos muy claro que la unidad no tiene propietarios, que la verdadera unidad se da en la lucha diaria sin titubeos ni cálculos ajenos a los intereses de clase, que la unidad no necesita cabezas afirmativas - que cual enfermos del Parkinson- se mueven una y mil veces hacia abajo dando su aprobación. Ese tipo de unidad conduce inevitablemente a estas situaciones, en donde pueden surgir propuestas clasistas y combativas como en el pasado o también abrir espacios al oportunismo.
En los años 60-70 se fue forjando también, una fuerza dentro de la CNT que agrupaba sindicatos que entendían la lucha sindical de otro modo. BAO-FUNSA-PANADEROS-GRAFICOS-
TEM-CICSSA-FUS, y otros tantos que formaron en los hechos y en la solidaridad recíproca con los gremios en lucha, lo que se dió en llamar la TENDENCIA SINDICAL, en línea totalmente opuesta a la oficial que representaba al Partido Comunista dentro del movimiento obrero. 
 
Hoy no sabemos si el grado de conciencia de estos gremios discrepantes, tiene algún grado de similitud con aquellos postulados. No sabemos por falta de información, si esos gremios pretenden conducir al movimiento obrero hacia posturas clasistas. Por ello abriremos un compás de espera y estaremos atentos a lo que vaya surgiendo, antes de dar una opinión apresurada que después tengamos que arrepentir.