Hasta siempre amor...

por Hugo Bruschi en el Año contra la Impunidad.

Ayer leíamos en la prensa las declaraciones del Sec.General de la OEA, el oriental Almagro. El hombre felicita al espectro político venezolano, por su madurez y por la transparencia con que se llevaron a cabo las elecciones. En una foto del mismo diario, un grupo de la "oposición" vencedora en la contienda, daba rienda suelta a su alegría portando una bandera de los EEUU. Cualquier desprevenido puede llegar a creer, que se trataba de un acto electoral en aquél pais y no en la República de Venezuela.
Días atrás este mismo Sr. Almagro junto a Macri, fueron protagonistas sin ser venezolanos, de la campaña electoral de ese país. Almagro a través de una carta dirigida a las autoridades venezolanas, alertaba sobre la falta de libertades, de expresión y de ejecución de opositores. Macri insistía con aplicar la Carta Democrática que posibilitaría la expulsión de Venezuela del Mercosur. Es justo reconocer que las 2 intervenciones alcanzaron los resultados esperados. Ahora Macri acaba de declarar, que ya no necesita demandar a Venezuela ante el Mercosur. Ya no hay peligro alguno. Parece que aquella Sociedad convulsionada y peligrosa, cambió de status a las pocas horas de conocido el resultado electoral. Se acabaron las muertes. Macri y Almagro ya pueden dormir tranquilos.
Sin embargo en el caso Almagro y su odio al chavismo disimulado algunas veces, deberemos recordar un episodio que no comenzó con su llegada a la OEA, de manos de sus patrones para mejor representar sus intereses coloniales. Recuerdan Uds. Amigos de La Vidriera cuando se iba a discutir en Río de Janeiro el ingreso de Venezuela al Mercosur? Recuerdan Uds. cual fue la posición que Uruguay llevaría a ese encuentro de la mano de Mujica-Astori-Almagro? Era la de negar el ingreso de este país al Mercosur, teniendo en cuenta la resistencia de Paraguay y su senado que se oponían al mismo. Pero que fue lo que los hizo cambiar de opinión para que terminaran contra su voluntad votando tal ingreso? Nada más ni nada menos, que unos tirones de oreja como se merecen los que insisten en portarse mal, proporcionados por Cristina y Dilma quienes parecen haberles dicho que no se pasaran de "Vivos", que ya los conocían y sospechaban para quien estaban jugando. Por ello tampoco entendemos la indignación del Sr. Mujica, ante la carta de Almagro al gobierno de Venezuela. A que juega su progenitor, a qué vienen esos arrebatos de indignación de última hora? "Ahora te digo adiós y me despido" más parecen las estrofas de un bolero o de un tango, que de una carta seria discrepando con el hijo pródigo. Astori por lo menos fue más consecuente y acompaño el ataque a Venezuela en todos sus términos.
Así que vayan teniendo en cuenta Amigos venezolanos, con que clase de gente están tratando. Por supuesto que los Venezolanos ya los conocen, aunque nunca estará demás refrescarles la memoria, por las dudas.