miércoles, 30 de septiembre de 2020

El original y la copia.....

 

por Hugo Bruschi
Hace muchos años atrás, montaron su campaña presentándose como lo más puro de la Sociedad. Dijeron que eran distintos y pidieron un voto de confianza, a una sociedad cansada de promesas incumplidas. Y esa sociedad se lo otorgó. Pero con el paso del tiempo, se fueron pareciendo cada vez más, a lo que prometieron combatir, es decir a las clientelas electorales que llenaban la Administración Pública con amigos, amigotes, amantes y protegidas con apartamento incluido. Los llamados concursos de oposición y méritos, pasaron a ser un adelanto manuscrito. Los méritos ahora se hacían en algún amueblado. Poco a poco hicieron lo mismo disfrazado con otros nombres y "necesidades". En tal sentido Toma no inventó nada. Acusaron de corrupción y terminaron siendo más corruptos. Acusaron de portar ciertos apellidos a quienes no se pueden despojar de los mismos por ser "hijos de", sin mencionar que en sus filas parasitan muchos sin más méritos que ser "hijos de". Acusaron a los otros de vender la soberanía, pero no tuvieron problemas en formar una alianza para regalar el agua y el territorio a UPM. Pero se olvidaron de una premisa: LA GENTE PREFIERE EL ORIGINAL ANTES QUE UNA COPIA.

 
Y ahora se van viendo los resultados. Ganaron la Intendencia por el sistema de acumulación y perdieron en algunos municipios, curiosamente el F que congrega a los barrios más carenciados y olvidados. Qué pasó, hay alguna explicación?

 
Se rieron de la gente del campo y ridiculizaron sus reclamos, los acusaban de viajar en 4 x 4, de ser oligarcas, los desoyeron con arrogancia y prepotencia, hicieron lo mismo que el Partido Colorado hace más de 100 años y que mereció la respuesta de Aparicio Saravia. Ahora tuvieron la respuesta en las urnas. Dividieron a los uruguayos entre "pueblo y oligarquía". Ellos eran los malos y nosotros los buenos, le hacían creer a la gente. Y esa prédica irresponsable, prendió en cierta gente de pocas luces, al extremo que alguien le gritaba "Oligarca" a un milico que no llega a fin de mes. No contentos con ello, ahora con el escrutinio a la vista, insultan a los paisanos tratándolos de idiotas. Algunas ollas populares del Interior dejan de funcionar. "vayan a pedirle comida a quienes votaron" parece ser la consigna. Se llegaron a parecer y aún superar, todo lo negativo que decían rechazar. Pero al igual que la máquina termina matando al inventor, ahora tuvieron su propia guillotina.