jueves, 17 de septiembre de 2020

El Camello y la aguja

por Hugo Bruschi

Se le atribuye a Cristo cuando de llegar al cielo se trata. Sería más fácil que el camello pasara por el orificio de la aguja, que los ricos llegaran al cielo. Traido a nuestros días, sigue teniendo vigencia, pero como no somos tan exigentes nos conformamos con los corruptos sean ricos o nó, pasaran por la Justicia de la tierra. Cómo lograrlo en un país que adora a sus corruptos, es otra historia......con el agravante que todos aquellos que denuncien o renieguen de este gran circo, sean acusados de asociales o desestabilizadores. Como nos decía el tango "las 40", "no pensar ni equivocado para qué si igual se vive, y además corrés el riesgo que te bauticen gil" El rebaño no perdona a los que quieren romper el cerco,a los que piensan.

Ayer leo en un diario que "volvió el cuento del tío", alertando a la población mayor,que sería el objetivo de los cuenteros. Sin embargo la pregunta sería: Cuando se fue? Toda la Sociedad es víctima permanente de este cuento, son engañados y estafados un día sí y el otro también. Pero siguen creyendo y siguen contentos. Les prometieron cisnes en las aguas del Miguelete y la realidad nos muestra caballos muertos, perros nauseabundos flotando, ratas y condones y después de 30 años les prometen aguas cristalinas. Y del otro lado de la campaña, pasa algo parecido aunque es justo hacer notar que hace años que no gobiernan, pero sospecho que la basura seguirá amontonándose en la vereda, en forma bien democrática pues todo el mundo la arroja. A propósito de Democracia, están los que te dicen "querés que vuelva la Dictadura?" o sea que si no te gusta esta sopa, 2 platos para que aprendas. Y así se la van llevando, con un pueblo que no piensa que la Democracia es otra cosa, que esto es un simulacro, es decir una variante del cuento del tío.

Días pasados, la policía detuvo a una conocida "mechera" en las puertas de un Shopping y la mujer que tiene mucho oficio, se les tiró al suelo esperando al público que sin saber de que se trataba, tomaba partido por la misma. Un policía que creyó estar cazando leones en África, se le sentó arriba. Deplorable y debe ser destituido. Pero lo cómico fue escuchar los gritos de una mujer desde el público: "Oligarca, Oligarca!! le gritaba al policía. Yo me quedé pensando qué negocio redondo es la Democracia, pues el voto de esa mujer vale lo mismo que el tuyo. Como decía Discépolo, "lo mismo un burro que un gran profesor".....

Bueno, ahora parece que se han puesto de moda en las redes, los llamados arrestos que son filmados como nunca. He estado observando algunos y curiosamente escucho la misma voz de una mujer en los relatos dramáticos. "Bo que estás haciendo, dejalo tranquilo que es inocente, etc." De seguir así la cosa, vamos a tener que publicar el manual del arrestado, tal cual los Sindicatos de la Enseñanza publicaron uno contra "futuros allanamientos a los locales".

Parafraseando a Cristo diremos que es más difícil que el pueblo decida algo con su voto, que el camello pase por la aguja.....