Peras al olmo?

por Hugo Bruschi

Mucha gente -talvez impregnada de un optimismo desmesurado- había depositado su confianza en que el Pte. Lacalle Pou, suspendiera o en el mejor de los casos anulara el contrato ROU-UPM firmado por el anterior gobierno, respaldado por todos los Partidos con representación parlamentaria y por si esto no fuera suficiente, por el mismo PIT-CNT.

De dónde surgieron estas espectativas? Bueno, ha habido un cambio importante en la realidad del país y del mundo a causa de una pandemia, que ya lleva más de 50.000 Muertos y más de 1.000.000 de portadores del virus. Y es esta pandemia precisamente la que nos permitiría rescindir el contrato, dado que en el mismo se consagra en su artículo 7.1 esta posibilidad. Y esta es la nueva realidad que llevó a la gente, a confiar en una actitud firme y decidida del Presidente. Ahora no hay excusas, ya no corremos aquel riesgo inicial, de ser llevados ante los tribunales internacionales por incumplimiento. ES MÁS AÚN, ESTARÍAMOS DANDO CUMPLIMIENTO AL MISMO CONTRATO. O sea que el incumplimiento sería no aplicar esa cláusula, desconocer ese mandato que nos otorga el contrato.

Pero estas espectativas han sido defraudadas y ahora en cambio, nos hablan de enviar señales de confiabilidad a las calificadoras de riesgo y los organismo de crédito. La pregunta que todos nos hacemos es, si no sería más humano, más digno de un Presidente, destinar esos 4.000 millones de dólares a la reconstrucción de una economía en ruinas -valga la expresión- una vez superada la pandemia y no agrandar la fortuna de una multinacional depredadora, que nada nos dejará sino un desastre ecológico de una magnitud inimaginable. El argumento es pobre por donde se lo mire. Seguramente el Presidente Lacalle Pou podrá argumentar "yo no firmé el contrato" y tal vez tenga razón. A su vez también prometió un cambio y según él, la gente votó por ese cambio y la pregunta que todos nos hacemos es, si en ese cambio estaba exceptuada UPM....

Sr. Presidente, Ud. debe gobernar para todos los uruguayos, para quienes lo votaron y para quienes nó, de otro modo la popularidad inicial alcanzada en estos días de crisis, corre el riesgo de perderse. No cree Ud. que es más importante lograr la confianza de su pueblo, en lugar de la de los banqueros? Piénselo, no estaría demás. ...