Como vino se irá.......

por Hugo Bruschi

Quien mejor que Antonio Casciani, canillita, poeta y anarquista, para haber pintado con su letra, aquél cuadro llamado Un año más, quien mejor que un hombre que recorre las calles, para saber quien es quien. Vienen a mi memoria todos los 31/12 a las 23.55 cuando en mi casa era un ritual eschuchar por C X 40 Radio Fénix, el mensaje de fin de año en la persona de su Director y acto seguido a Carlos Gardel interpretando UN AÑO MÁS.

Hoy despedimos otro año signado por el dolor que aqueja a tantas familias uruguayas, al haber perdido a un ser querido, víctima de esta pandemia que azota al mundo. Y lamentablemente tampoco podremos decir que: "de esperanzas risueñas el año es portador", por el contrario creemos que será un año peor y no sólo por la pandemia que seguramente irá desapareciendo, sino porque a la vuelta nos espera más pobreza, menos trabajo al cerrar muchas empresas o reduciendo el personal para poder sobrevivir. Esta es la condena que soportaremos los paises del capitalismo dependiente, el capitalismo de la periferia. Serán los nuevos tiempos post-pandemia. Despediremos el año con esta amenaza y no serán muchos los que "alborozados festejen el nuevo año" pues a las recomendaciones sanitarias, debemos agregar la incertidumbre de un futuro incierto. Esta es la cruda realidad que deberemos asumir con el espíritu templado. Y la deberemos afrontar pensando en nosotros lo que no significa egoismo o indiferencia, menos falta de solidaridad. Todo lo contrario. Apostar por nosotros significa dejar de lado emociones que sólo tienen lugar en la Colombes o en la Amsterdam, deshacerse de banderas desteñidas y colores traicionados, dar la espalda a quienes en nombre de tal o cual caudillo, defienden sus privilegios que no son los nuestros, dar la espalda a los que en nombre del pueblo, sólo piensan en su bancas y sillones, a quienes no reparan en usar memorias y huesos en busca de un voto. Unos y otros disfrazados como el lobo de Caperucita Roja. Será la única forma de sentirnos libres de cargas que no nos permiten avanzar, la forma de no sentirnos cómplices de nuestra propia desgracia. Nos merecemos otra suerte, este no es el país que soñó El Viejo, ni los que por el mismo, otros orientales ofrecieron sus vidas.

LA VIDRIERA IRRESPETUOSA quiere dejarle a todos los uruguayos bien nacidos, este mensaje crudo, amargo, pero sin edulcorantes, sin vagas ilusiones. Y este 2021 como dijo el canillita, como vino se irá. Para los pobres y postergados todos los años son iguales, siempre corriendo la liebre. Lo único que podemos ofrecer a nuestros amigos y compañeros, es UN GRAN ABRAZO FRATERNO.