COMO CON BRONCA Y "JUNANDO"......
por Hugo Bruschi en el Año de la Resistencia
..........de
contemplar "como se pianta la vida" y como no hemos aprendido todo lo
que haría falta, para encontrar el camino correcto. Ese que nos llevará -
nó sin dificultades- al destino tan anhelado, en donde se hagan
realidad nuestros sueños, nuestros modestos sueños que no pasan por la
felicidad individual ni el poder de compra, sino en la igualdad y el
bienestar colectivo. Esa utopía sin la cual, la vida no tendría sentido.
Hace
algunos años, muchos tal vez, nacíamos a la vida política del País y
por entonces era frecuente escuchar o leer en la prédica de izquierda,
que "el capitalismo tenía los días contados", que sólo era cuestión de
acelerar su caida. Y en esa batalla estuvimos, con avances y retrocesos,
con períodos que llamaban al optimismo y con otros cargados de
desaliento. Y como resultado de todo ese proceso dialéctico, se fueron
decantando las opciones y sus protagonistas. La revolución Cubana y la
derrota más tarde del imperialismo en Vietnam, pusieron de manifiesto
otras formas de lucha anti-imperialista y anti-capitalista, en sus
distintas etapas hacia la meta final. Reformismo o Revolución, fueron
por entonces las alternativas a tales propósitos. Unos apostando al
desgaste del capitalismo como sistema, otros jugándose la vida a la toma
del poder y el control de los medios de producción, entre los que la
Reforma Agraria figuraba como primer punto de tal estrategia. Al grito
de Patria o Muerte se largó el combate frontal al sistema, en donde unas
pocas familias, 500 para ser más exactos, eran dueñas del Uruguay. Y
este glorioso intento, fue sofocado por el Estado a través de sus
guardianes, convirtiéndose el País en un gran campo de concentración,
vigilado y amenazado, en donde se institucionalizó la tortura como medio
de alcanzar confesiones y paralizar por miedo a quienes intentaran algo
nuevamente. El sistema no distinguió entre reformistas y
revolucionarios y éstos se encontraron en las cárceles, en las salas de
tortura y en las desapariciones.
Una vez vueltas las aguas a sus
cursos "normales"- es decir la joda de siempre - quedaron al descubierto
algunos restos que testimoniaban un período de desbordes. Se fueron
dando algunos cambios de identidad y de ideología, entre muchos de
aquellos protagonistas. Sobretodo en aquellos que participaron en forma
emocional, faltos de convencimiento. Y también en otros, que a la postre
resultaron aventureros en busca de prestigio personal, de mandos y
cargos importantes.
Quién nos habría de decir por entonces, que esta gente alcanzaría con el sistema, lo que no pudieron cuando lo combatían
En
el fondo llegaron a donde soñaban y entonces cabe preguntarse? Aquello
del capitalismo como sistema enemigo de la felicidad pública, era cierto
o simplemente un verso en boca de aventureros? A juzgar por lo que
después mostraron, podremos decir sin lugar a dudas, que sí lo eran.
Sin
embargo no fueron bobos......pues a efecto de conseguir simpatías y
recaudar votos, apelaron a relatos dolorosos y un pasado insurgente. En
ningún momento le dijeron a la gente que estaban arrepentidos o
reciclados, eso lo sabían sólo ellos y los militares que les dieron el
visto bueno. Y este fue un golpe magistral a las espectativas de la
gente, pues el daño que estos traficantes de ideas le han causado a la
liberación nacional, sólo podrá ser evaluado en toda su dimensión,
dentro de algunos años.
A la luz de estas experiencias y en un
presente desalentador por lo menos en el corto plazo, no entendemos como
todavía hoy, hay gente que pierde su tiempo en largas discusiones,
estériles y aburridas, con ríos de tinta que van y que vienen, con lo
que dijo Marx o lo que dijo Lenin, o Trostsky o Bakunin, de si foquismo o
Partido, de si cortoplacismo o largoplacismo, de si Cuba debe hacer
esto o Venezuela lo otro. Hasta cuando? Estaremos enfermos de libros,
estaremos tan lejos de la realidad que ya no entendemos a la gente, que
ya no sabemos en que andan y si andan adonde quieren llegar? No habrá
llegado la hora de dejarnos de joder con las izquierdas y con las
derechas, que tan bien le vienen al sistema que decimos combatir? Yo
eligiría comenzar a hablar de los que tienen y los que nó, de pobres y
de ricos, de estafados y estafadores, de jodedores ideológicos y de sus
víctimas inocentes. Tal vez así logremos hablar un idioma en el que
todos se sientan representados y tal vez se arrimen a participar.
