martes, 16 de febrero de 2021

La indiferencia toma partido

 

 por Hugo Bruschi


Siempre hemos sostenido que la indiferencia así como la neutralidad, favorecen al agresor o al transgresor. En el fondo es un voto por la impunidad. Días atrás, se registró un hecho abominable en donde unos funcionarios policiales en cumplimiento de sus deberes, fueron salvajemente agredidos por una patota, a tal extremo que alguna gente que presenció el hecho, reclamaba el empleo de armas para defenderse. Por suerte no lo hicieron, evitándose de este modo un derramamiento de sangre y tal vez una o más vidas. Y por supuesto la prisión o la pérdida del empleo en el mejor de los casos.


Qué ha pasado en la Sociedad uruguaya, qué juicio le merecen estos actos de barbarie contra personas que cumplen con su deber? No hemos visto, desde gente que permanentemente acusa a la policía de "desbordes o excesos", una sola declaración de rechazo, una sola declaración de condena y apoyo a la policía. Aquí se necesita una actitud responsable, frente a quienes tienen el deber de hacer cumplir la ley o las órdenes impartidas. Hasta cuando seguiremos alimentando el odio hacia la policía, amparados en viejos argumentos nacidos de una época que por suerte ya superamos? Estamos frente a la misma policía? Que hayan policías corruptos o torturadores, no lo ponemos en duda, pero justifica que identifiquemos a toda la Institución como tal? También hubieron vicepresidentes corruptos, legisladores o ministros y no por ello acusamos a todo el gobierno o los gobiernos.... Es parte de la sociedad y el que se sienta perfecto que arroje la primera virtud.


Ha llegado la hora en que partidos políticos, organizaciones sociales, los que están a favor de la vacuna y los que están en contra, los que están por la distancia social y los que quieren seguir bailando, hagan una declaración en relación a estos hechos y dejen el odio de lado creyendo que el caos es la solución. Cuando el caos se manifiesta, todos seremos víctimas de un modo u otro. A mí personalmente no me gusta UPM ni su tren, saldré por ello a matar al maquinista? Tampoco me gustan los inspectores que ponen multas, saldré por ellos a golpearlos o entenderé que ese hombre está cumpliendo con la tarea encomendada? Nos habremos deshumanizado tanto, que un hecho cobarde y reprobable, lo juzguemos de acuerdo a nuestras simpatías? Si esto es así, me atrevo a afirmar que Gavazzo y Ferro nos ganaron. La Vidriera sostiene que no nos queremos parecer a estos criminales.....