sábado, 29 de junio de 2019

Un pàís en fuga




por Hugo Bruschi

Se fugan los que están presos y se fugan los que están libres, tal vez por miedo a caer presos. La fuga es un derecho inherente al individuo, por algo no es penada, salvo violencia física o material mediante.

Pero en este contexto, parece ser que los medios se ocupan sobremanera sobre ciertas fugas, otras pasan casi desapercibidas, si la prensa o la TV no lo dicen, no existen. Más o menos así son las cosas. No hace mucho tiempo se fugó Ferro que por otra parte nadie sabe como andaba suelto. Hoy nadie sabe nada de él, talvez gozando de buena salud en el Mediterráneo. Antes anduvo Cordero por Brasil y fue requerido por Argentina. Y esta práctica parece extenderse a toda la Sociedad. Se ha fugado la Justicia y nadie la encuentra, salvo aquellos que tienen dinero para pagar el peaje. Se fugan los dineros del pueblo, que van a parar a las cuentas de alguna multinacional de la depredación, que llegan a colonizarnos y a pudrir el agua vital para la vida. Se fugan las responsabilidades y todos dicen: "yo no fuí o he actuado de buena fé", se han fugado los concursos de "oposición y méritos" y ahora alcanza con tener una mano "compañera" de las que cortan el bacalao. Se fugaron los aviones de Pluna y no volando precisamente y con ellos los millones de dólares que terminamos pagando nosotros. Se privatizan las ganancias y se sociabilizan las pérdidas. Se fugaron los millones de préstamos a empresas fundidas, se fugaron los diputados y los senadores cuando el contrato ilegal, anticonstitucional y vendepatria de UPM. Hace años se fugó la llamada "oposición" y nadie sabe donde está. Se fugan los que siempre se fugan a la hora de dar la cara o rendir cuentas ante sus propios votantes. Y amenazan con fugarse, lo que cansados de versos, mentiras y traiciones quieren optar por su dignidad y no terminar como cómplices. Y para evitar esas fugas como ya lo hicieran antes con el famoso "giro a la izquierda", ahora aparece en escena un personaje repartiendo certificados de "compañeros".

Amigos de La Vidriera, hay cosas que me hacen perder la calma y también las buenas costumbres.: La gran puta, no habrá nadie que le diga que no necesita su visto bueno para sentirse compañero, no habrá nadie entre los viejos luchadores que le diga que esa palabra es muy grande y muy fuerte para estar en boca de cualquiera? Nadie que le diga que la palabra compañero se aprendió en La Teja y en el Cerro hace ya muchos años, en las huelgas y en las barricadas, en los Sindicatos de dirigentes laburantes y jamás rentados, de los que como Gatti o Duarte jamás hicieron gárgaras con esa palabra para juntar votos, para sentarse a la mesa de los que antes criticaban? Nadie que le diga a este personaje: NO ENSUCIES LA PALABRA COMPAÑERO QUE TE QUEDA MUY GRANDE?.

Por esto y mucho más, si Uds. han pensado fugarse de tanta infamia, de tanta ignominia, de tanta entrega y de tanta traición a la sangre derramada, a la sangre compañera, Uds. encontraran sin lugar a dudas el camino correcto y si aún están en esa búsqueda consulten a su conciencia y obtendrán su respuesta…...