lunes, 23 de junio de 2014

La patria es nuestra, el negocio ajeno....


por Hugo Bruschi en el Año de la Dignidad.

Desde esta vidriera hemos comentado en más de una oportunidad, que el daño causado por el progresismo uruguayo a la causa de la liberación, sólo podrá ser analizado en toda su magnitud, dentro de algunos años. La liberación impostergable que soñaron tantos orientales, la que rompe cadenas que atan al yugo de la dependencia, liberación sin la cual no podrá existir destino posible como país en vías de desarrollo,que contemple las necesidades básicas del individuo y no la de los bancos y otros prestamistas. La liberación que nos permita comer con dignidad, lo que nuestras manos producen y no recibir como limosna lo que nos corresponde por derecho. Esa misma liberación por la que pagaron con su vida tantos uruguayos, tendrá que esperar. Ese es el daño que oportunistas, impostores y aventureros, le han causado a la causa del Pueblo y en alguna medida también, a la de otros Pueblos hermanos.

Cuando uno contempla ciertas ceremonias de homenaje a José Artigas, encabezadas por gente que representa todo lo contrario a aquel pensamiento del Viejo, nos vienen ganas de llorar de impotencia, bronca y asco a tanta infamia. Pero cómo explicarle a las nuevas generaciones, que estos caminos ya han sido recorridos, que estas políticas económicas fueron puestas en marcha 100 años atrás y que sólo conducen a la dependencia cada vez más acentuada. Préstamos sobre préstamos y más préstamos, para pagar una deuda que crece día a día. Cómo decirle a los jóvenes que esto representa la entrega lisa y llana de nuestra soberanía, cuando quienes llevan adelante estas políticas, fueron guerrilleros  u hombres de izquierda? Alcanza con entrar a las redes sociales, para contemplar como gente carente de todo conocimiento, esgrimen como todo argumento que estos hombres estuvieron presos. Cómo hacerles entender a miles y miles de uruguayos, que tener un arma en la mano no otorga patente ni diploma de revolucionario.Los militares tienen arsenales repletos de armas y las saben manejar muy bien, pero no son revolucionarios sino que representan el brazo armado de los poderosos, sus guardaespaldas - y que sin saberlo muchos de ellos - consagran la injusticia a través del miedo impuesto a la población. Cómo explicarle a los jóvenes y a quienes aún no han entendido la nueva estrategia imperialista, de emplear a su servicio a los que ayer se hacían llamar anti-imperialistas y revolucionarios.

Y saben porqué? Porque el capitalismo es inteligente y capta enseguida para ponerlo a sus órdenes, a los que luchaban por un lugar en el sistema y querían sentarse a la misma mesa y además ser bien atendidos. Pidieron a gritos ser aceptados como confiables, e incluso le prometieron administrar esta suerte de capitalismo Colonial, mejor que los Partidos tradicionales, sin convulsiones sociales, con un buen control del movimiento obrero, con un discurso de izquierda, para que gente como la que mencionábamos hace un instante, trague el anzuelo y repita "en el Uruguay gobierna la izquierda". Le prometieron al Fondo Monetario, a Wáshington, al Banco Mundial y demás acreedores, que pagarían la deuda puntualmente, deuda inmoral que le están haciendo pagar a los recién nacidos, que nacen endeudados sin haber visto un sólo peso para comprar pañales. Y cumplen con notas de aprobación y menciones especiales, a tal extremo que los Rockefeller y los Soros, por mencionar a algunos, jamás volverían a apoyar a Blancos o Colorados, por considerarlos inconvenientes para la tranquilidad inversora. No pueden controlar a los trabajadores y además son groseros, pasados de moda y cavernarios.

Y en este panorama triste y desolador, se desenvuelve la vida política del país, en donde ya ni siquiera la Tierra es uruguaya. En donde ya no podremos hablar de "oligarquía terrateniente" porque la tierra ahora es extranjera y tiene muchos dueños, y en donde el negocio viene por otro lado. La soja transgénica parece ser uno de los más rentables. En donde las empresas depredadoras, ansiosas de ganancias, exoneradas de cargas fiscales, haciéndose de contratos lesivos para la soberanía del país y firmados en secreto, hoy tienen tanta incidencia en cuestiones que de otro modo serían de privacidad estatal, que consigue leyes que llevan su nombre y sin competencia a la vista. Para no hablar de funcionarios judiciales, que han pagado con la separación del cargo, por el hecho de hacer preguntas incómodas, molestas como quien dice. En donde hasta el mismo Poder Judicial parece estar al servicio de esta gente, pues al declararse socio el estado en estos emprendimientos, impide a otro poder del Estado intervenir en su contra.  Esto es realmente irritante. Y en este sombrío panorama se escucha decir una y mil veces, que estamos despegando,que estos emprendimientos mineros serán de gran beneficio para todos los uruguayos, que quienes se opongan a estas bondades serán considerados poco menos que enemigos del proceso, del gobierno y de la izquierda, pues le estará haciendo "el juego a la derecha". Para todos aquellos que sin pensar repitan  estos poemas, les queremos hacer saber que la famosa derecha compuesta por Blancos y Colorados, también está de acuerdo con el gobierno. Que tanto Blancos como Colorados, también apoyan al gobierno en esta escalada de provocaciones contra la Rep. Argentina y en favor de UPM que es otra de las empresas que tiene mucho peso en las decisiones del gobierno. O SEA QUE IZQUIERDAS Y DERECHAS, ESTAN UNIDAS Y EN LA BRECHA. Apagá y vamos.....